Bogotá, 4 de abril del 2021. fue entregado a los magistrados de la Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz, el informe titulado “La devastación de un pueblo: medios y métodos de guerra ilícitos empleados por las Farc”. El documento presentado por la Corporación Militares Victimas del Conflicto Armado “Milvíctimas”, entregó un informe detallado que pone en evidencia las graves infracciones al Derecho Internacional Humanitario y las afectaciones causadas por artefactos explosivos improvisados empleados por las extintas FARC-EP durante el conflicto armado. Dos años después de la entrega, los hechos contenidos en el informe aún no han sido priorizados.
Trampas mortales sembradas en contra del pueblo colombiano
Durante más de 30 años de conflicto, el país ha sido testigo de desgarradoras escenas en las que, por el uso de minas de antipersona, miles de colombianos entre civiles y uniformados, han comprometido su integridad, dejando secuelas físicas y psicológicas permanentes, amputaciones, muertes y terror en la población azotada por este grave crimen. Según información del Alto Comisionado para la Paz (2019), desde 1990 al 2019, fecha de presentación del informe en la JEP, 7.180 miembros del Ejército Nacional habrían caído en estas trampas mortales, dejando heridos a 5.736 y 1.444 asesinados. Igualmente, información presentada por la Fiscalía General de la Nación da cuenta de 9.157 investigaciones relacionadas con el empleo de minas en nuestro país.
La presencia en los territorios de estos artefactos explosivos improvisados ha desencadenado fenómenos sociales como el confinamiento, deserción escolar, desplazamiento forzado y cambios en las actividades rurales frente a la imposibilidad de realizar las actividades propias de la vida rural, representando para las comunidades una ruptura con su cotidianidad, con los medios de subsistencia y con las formas de relacionamiento social.
Informe “La devastación de un pueblo: medios y métodos de guerra ilícitos
empleados por las Farc”
El pasado 4 de abril del 2019, militares victimas representados por la Corporación Milvíctimas, hicieron presentación ante la JEP del informe que busca priorizar el empleo de medios y métodos de guerra ilícitos por parte de las Farc, dentro de los que se destaca la utilización de minas antipersona como un crimen de guerra y una grave infracción al Derecho Internacional Humanitario. Con el documento, las víctimas de estos hechos buscan que se priorice este hecho victimizante de extrema gravedad en la Justicia Transicional para la Paz, para así lograr acceder a verdad, justicia y reparación.
El contundente informe, presenta la manera como las extintas FARC – EP acogieron esta práctica, plasmando incluso en documentos rectores, órdenes precisas para instalar de manera permanente minas antipersonas en los territorios, sin importar la presencia de población civil y menores de edad en ellos.
El informe entregado, logra a su vez soportar con evidencia hechos de afectación a la población civil por la utilización de estos artefactos ilícitos, resaltando casos emblemáticos como la activación de un campo minado en el Caquetá por parte de la temida Columna Móvil Teófilo Forero al paso de una comisión del ICBF en el 2008, asesinando con ello a dos civiles. Igualmente, el asesinato de dos menores en Nariño, por la activación de estos explosivos en el año 2014 y la instalación de un campo minado en cercanías a una escuela al sur del Tolima por parte del Comando Conjunto Central de las Farc en el 2015. Estos entre muchos otros casos, son recogidos en el informe que muestra en detalle la práctica perversa que viola el principio de distinción, base del DIH, así como también el Principio de Limitación, utilizando métodos y medios que no eran permitidos por el Derecho de la Haya.
Las víctimas de minas esperan por apertura de Macro caso en la JEP
Pese a los esfuerzos para ser tenidos en cuenta en la Jurisdicción Especial para la Paz, militares víctimas de minas antipersona continúan a la espera de la apertura del macro caso que priorice estos hechos victimizantes. Con la administración de justicia en esta instancia, se busca proteger los derechos de las víctimas y generar garantías de no repetición de estos terribles hechos. El reconocimiento y la participación de las víctimas de minas en la Justicia Transicional es un paso pendiente en el camino de reconciliación y reparación de la sociedad colombiana, que reclama escuchar a quienes padecieron de los más crueles vejámenes de la guerra.
Oficina de comunicaciones Corporacion “Milvictimas”